Escrito por tus Lolas

A ver, hacer amigos es todo un reto. Ahora, hacer buenos amigos siendo una joven-adulta, parece ser una odisea.

Mientras más maduramos, más nos damos cuenta de lo mucho que nos afectan, positiva y negativamente, las personas con las que más compartimos tiempo: sus estándares se convierten en los nuestros, nos comenzamos a parecer en opiniones, hábitos y hasta físicamente, y afectan completamente la forma en la que vemos el mundo.

Entonces vamos aprendiendo a ser más cuidadosas de con quiénes compartimos nuestro tiempo y a quienes elegimos llamar amigos.

Lola: con el tiempo no solo vamos subiendo en años sino en estándares. Debemos ser muy conscientes de a quiénes les damos nuestra energía y a quiénes nos queremos parecer. Somos el resultado de las expectativas de las 5 personas con las que más compartimos tiempo. Piensa bien en esto. Determina mucho de lo que eres hoy y de lo que estás construyendo para ti.

Entonces sí, estamos en una edad en la que despedimos con amor viejas amistades porque ya no conectamos con ellas ni hacen sentido en nuestra vida y también le abrimos espacio a personas nuevas que quieran construir amistades genuinas, honestas y expansivas. Buscamos que no solo sean leales y podamos confiar en ellas, sino que también nos reten intelectualmente, nos inspiren, admiremos, podamos sentirnos identificadas y con las que, al final del día, podamos ser ñoñas y reírnos de estupideces. Y no solo es esperar a recibir, sino ser capaces de dar esa amistad que nos encantaría tener.

Somos el resultado de las expectativas de las 5 personas con las que más compartimos nuestro tiempo.

Es difícil pero no es imposible: solo tienes que abrirte a nuevos espacios y experiencias porque no vas a conocer personas increíbles en lugares que ya has visitado y sabes que no hay nada bueno allí. Aplica para amigos, parejas… Aquí te compartimos algunas ideas:

  1. Participa de actividades y grupos: identifica cosas que sean de tu interés y busca ser parte de ello. Puede ser un club deportivo, un grupo de lectura, alguna organización benéfica, etc. Esto te permitirá conocer a personas con intereses similares.
  2. Asiste a eventos sociales: anímate a salir de tu casa y asistir a eventos sociales como fiestas, cenas, etc. que sean organizados por tus conocidos. Si no tienes muchas invitaciones, arma tú el plan con las personas que te gustaría tener más cerca de ti y diles que lleven amigos.
  3. Toma clases o talleres: aprende algo nuevo que siempre hayas querido hacer pero de alguna forma encuentras una excusa para no hacerlo. Puede ser algo relacionado a arte, música, cocina, etc.
  4. Utiliza las redes sociales a tu favor: conecta con personas con intereses similares. Puedes unirte a grupos en línea o seguir a personas que te inspiren y ver quiénes le siguen, quiénes interactúan y comenzar conversación. Es más simple de lo que crees.
  5. Sé abierta: no tengas miedo de acercarte a personas nuevas y de iniciar una conversación. A veces solo se necesita un momento de incomodidad compartida para comenzar una amistad.

No tengas miedo de invitarles a salir, contarles cosas personales que te sientes confiada de compartir o ser la que busca. Lo único que puede suceder es que te encuentres conociendo una amistad increíble o te des cuenta que no vale la pena seguir intentando.

Hacer nuevos amigos toma tiempo. Puede que hagas todo esto y aún no sientas que conectas genuinamente con alguien para llamarle amigo, pero recuerda que cualquier relación que quieras en tu vida no se encuentra: se construye.